ACTÚA HOY
• A las 22.30, en Casa Managua (San Juan 1.015).
Aldana Moriconi tenía apenas 11 años cuando en 1987 integró el coro de El Club de los Chicos, donde cantó “Mi vecino amigo”. Ya había recorrido los 60 kilómetros que separan la Casilda rural donde nació hasta Rosario, y al año siguiente comenzó su carrera como artista, enfocada principalmente en el folclore, pero también con algunas incursiones en el tango.
Esta santafesina de pura cepa nunca la dejó: se recibió en la Escuela de Música de la Universidad Nacional de Rosario; actuó en comedias musicales y en distintos coros; ganó el Pre Cosquín en 2008; obtuvo premios en festivales en Peyrano, Villa María, Entre Ríos, Baradero y Azul; y actuó en los principales escenarios del país y en Brasil y en Chile.
La artista desembarca en Tucumán esta noche, en Casa Managua, con la experiencia de tres discos editados como solista y la compañía del dúo tucumano que integran Angélica Camuñas y Gustavo Moyano.
- ¿Qué es “El camino del sueño”?
- Es mi tercer disco solista, luego de “Vida y luz” y “Pasen y vean”. En esta nueva producción, dejo asentada una etapa en donde despierto a muchas cosas. Estoy caminando mis sueños, compartiéndolos con mis compañeros y disfrutando de todo lo que va pasando.
- ¿Son senderos difíciles?
- Sí, por supuesto... Pero camino tranquila y sin miedo.
- ¿Qué compositores te conmueven?
- Tantos... Los que elegí para este disco, que tiene 10 canciones, son Víctor Heredia, Piero, Jorge Fandermole (está “Cantar del viento”), Adrián Abonizio (“El témpano”) y Fito Páez (“Yo vengo a ofrecer mi corazón”).
- ¿Cómo conociste a Camuñas-Moyano?
- Buscando videos en Internet llegué a ellos. Fue una gran alegría después poder comunicarme y estoy entusiasmada con compartir este espectáculo con ellos.
- Comenzaste de niña en el canto, ¿es conveniente?
- La verdad, no lo sé. Mi trayectoria tuvo sus cosas muy buenas, como la experiencia en la profesión, y otras quizás no tanto, pero por suerte pude hacer toda mi secundaria bien y estar con mis amigos también.
- Tu inicio fue como una artista infantil y parte de su material se vincula con ese segmento. ¿Cómo es tu relación con el público más chico?
- Buenísima, me encanta compartir con los chicos y estoy segura que a ellos conmigo. Siempre los invito a cantar y bailar
- ¿En qué momento está el folclore argentino?
- Me parece que siempre está dentro de nuevas búsquedas y en evolución; lo que me encanta es la diversidad que tiene. En Rosario hay una corriente muy rica, y me atrae la apertura que tiene el género, con la inclusión de elementos no convencionales y de nueva poesía.
- ¿En qué corriente folclórica te inscribís?
- En ninguna, a mi canto lo dejo libre. Trato de dejarme llevar por todas las corrientes, incluso por otros estilos de música popular que me seduzcan, para poder ser auténtica con las cosas que quiero decir.